La Fiscalía de Brasil acusa a Lula Da Silva, expresidente de Brasil, por un supuesto blanqueo de capitales ligado a los sobornos de Odebrech. La denuncia interpuesta por también se hizo a otros dos hombres. Da Silva se enfrenta de nuevo a serias acusaciones de las que ya ha estado sometido con pena de cárcel.
En este sentido el ente judicial anunció que «encontró indicios del pago de sobornos por parte de Odebrecht. Estos pagos alcanzaron el valor de cuatro millones de reales (unos 760.000 dólares). Con una data entre diciembre de 2013 y marzo de 2014″, cuando Lula ya había abandonado el poder».
Por su parte el procurador Alessandro Oliveira, destacó que la denuncia va acompañada de un «amplio conjunto de pruebas», que de acuerdo a las expresiones del funcionario fundamentan los cargos formulados.
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Asimismo, la Fiscalía de Brasil, determinó que este lavado de dinero se hizo, al parecer, a través de la Fundación Lula, que por cierto también fue objeto de investigación por corrupción.
Precisamente, el monto que se maneja por los sobornos, según la investigación, lo «disfrazaron en forma de donación filantrópica» a través del Instituto Lula.
Es así que, la Fiscalía brasileña presentó hoy una nueva denuncia contra Luiz Inácio Lula Da Silva. La exactitud de la denunciacontra el exmandatario expresa un «supuesto lavado de sobornos pagados por el grupo Odebrecht».
Es de recordar que, Lula fue condenado en un caso relacionado con la operación anticorrupción Lava Jato, por la que el expresidente ya fue sentenciado dos veces.
Las operaciones ilícitas
«Los valores ilícitos fueron transferidos mediante cuatro operaciones de donación simulada realizadas por el grupo Odebrecht. Las operaciones de pago en favor del Instituto Lula.
La Fiscalía de Brasil informó que cada una de las transacciones tuvo un valor de un millón de reales» (190.000 dólares). Según la nota que la Fiscalía y el Ministerio Público emitió.
Amplios antecedentes de Lula
Lula Da Silva, de 74 años, alega ante los medios que es víctima de «persecución judicial». El expresidente de Brasil fue condenado dos veces por corrupción y blanqueo de capitales. Aunque actualmente está en libertad, luego de pasar un año y siete meses en la cárcel.
En referencia a su primera condena, fue de 8 años y 10 meses de cárcel, de la que ya cumplió 19 meses, y fue ratificada en tercera instancia y aún falta el análisis del Tribunal Supremo para que sea firme.
La segunda fue ratificada por un tribunal de segunda instancia que aumentó la pena a 17 años y 1 mes de prisión.
Además, responde a varios procesos por casos similares vinculados también con la operación anticorrupción Lava Jato, que desde 2014 investiga los desvíos en Petrobras y ha llevado a prisión a numerosos políticos y empresarios en Brasil. En informaciones del portal Panorama.
