Johnson & Johnson comienza pruebas de fase 3 para su vacuna de solo una dosis que implican la simplificación de su eventual distribución a millones de personas. Las pruebas finales se realizarán en unos 60.000 voluntarios con resultados para finales de año o principio del 2021 de acuerdo a The Washington Post.
La farmacéutica Johnson & Johnson reclutará a sus voluntarios en todo el mundo según anunció el miércoles 23/09. La vacuna que, al contrario de sus competidoras que usan dos dosis, es de una sola dosis para lograr la inmunización contra el covid-19. Esta característica la hacen logísticamente más fácil de administrar y distribuir, insiste la compañía.
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Otra ventaja es que se puede almacenarse en un refrigerador normal por hasta tres meses. Las otras vacuna que se encuentran en fase 3 necesitan de congelación para su conservación.
Este proyecto de vacuna se convierte en el cuarto en EEUU en entrar en Fase 3 luego de Moderna, Pfizer / BioNTech y AstraZeneca. Los primeros participantes recibirán dosis el miércoles, dijo el Dr. Paul Stoffels, director científico de Johnson & Johnson, en un contacto telefónico con periodistas.
«Estamos convencidos de que una sola dosis podría ser muy eficaz», dijo Stoffels.
De demostrar su eficacia y seguridad la compañía promete fabricar 1.000 millones de dosis para 2021, según Stoffels.
Pruebas en poblaciones diversas
La vacuna de Johnson & Johnson utiliza el método de vectores virales. En este se emplea un virus inofensivo y se inserta en un gen que contiene el mapa de una parte distintiva del nuevo coronavirus.
Las pruebas se realizarán, además de EEUU, en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Sudáfrica. J&J realizará pruebas en niños luego de demostrar su eficacia y seguridad en adultos.
Estas pruebas masivas están diseñadas para abarcar una gran diversidad en la población participante. Es por ello que el tamaño y el alcance internacional se cuenta como una ventaja relata The Washington Post.
“Las pruebas de vacunas necesitan contar con una participación que refleje la diversidad en nuestra nación”. Así dijo al periódico Michelle Andrasik, directora de participación comunitaria de la Red de Prevención de COVID-19, entidad de EEUU que se asocia con las compañías que hacen pruebas.
De este modo también se busca una mayor seguridad en las pruebas. Esto en momentos en que es una preocupación la urgencia de conseguir una vacuna, por lo que se necesitan mayor cantidad de datos.
“Con una prueba más amplia también aumenta la seguridad establecida por los datos”, dijo Dan Barouch, director del Centro de Virología e Investigaciones de Vacunas del Beth Israel Deaconess Medical Center en Boston.