Este miércoles la Unión Europea, reiteró que mantiene su posición con relación a las elecciones parlamentarias convocadas por el régimen para el próximo 6 de diciembre; afirmando que no enviará una misión de observación si no se aplazan los comicios.
En un comunicado el organismo señaló que “actualmente no existen las condiciones para que tenga lugar un proceso electoral libre, justo y democrático. Se discutió la posibilidad de posponer las elecciones parlamentarias para abrir un espacio de diálogo y cambiar esas condiciones”.
Tras las conversaciones con Maduro, el organismo consideró que “sin un aplazamiento y una mejora de las condiciones democráticas y electorales; la Unión Europea no puede plantearse el envío de una misión de observación electoral”.
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Indicó además que la crisis humanitaria del país no se resolverá con un evento comicial; por lo que exhortan tomar medidas que conlleven a una transición política
“Es el momento de tomar decisiones audaces de propiedad venezolana en apoyo de una transición pacífica y democrática. Más allá del tema inmediato de las elecciones legislativas, el objetivo a largo plazo sigue siendo el camino hacia la democracia”, señaló.
En este sentido, abogan por un proceso de negociación. “Es necesaria una negociación entre todos los actores en Venezuela. Esto para encontrar una solución democrática, pacífica y sostenible a las necesidades y demandas del pueblo venezolano”.
Parte del comunicado de la Unión Europea
Tras la reunión ministerial del Grupo de Contacto Internacional (ICG) el 17 de septiembre; en particular la decisión del Grupo de trabajar para mejorar las condiciones electorales en Venezuela, dos funcionarios del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) viajaron a Caracas, con el objetivo de discutir directamente la situación en el país y reiterar la posición de la UE sobre las condiciones electorales vigentes.
Esta misión incluyó discusiones con el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y con la oposición. Las reuniones también incluyeron a funcionarios del régimen, la Conferencia Episcopal Venezolana, la sociedad civil y el sector privado; con quienes discutieron sobre los derechos humanos, los presos políticos y las libertades fundamentales.
Durante los últimos meses, el alto representante del organismo, Josep Borrell ha tenido numerosos contactos con actores políticos en Venezuela, para debatir los esfuerzos que permitan fomentar el diálogo y lograr espacios democráticos con los Estados miembros de la UE y los socios internacionales.
