La comunidad indígena de Santo Domingo de Turasen en el municipio Gran Sabana rechazó la instalación y operación de la Corporación Venezolana de Minería (CVM), para la extracción minera, específicamente aurífera.
A través de un reportaje en el periódico Correo del Caroní, se conoció que pretende instalar una oficina de la mencionada organización; por lo que temen que tenga un aval Estado para emprender la actividad minera en zonas protegidas, como el Parque Nacional Canaima.
En un comunicado, acusan a la institución de implementar políticas públicas que fomentan la desunión y que debilitan las estructuras organizacionales de los pueblos indígenas.
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«La instalación del ente no cumple desde el inicio con el principio de la consulta previa, libre e informada a los pueblos originarios; ni con el mandato de respetar la soberanía, sustentabilidad, visión sistémica, desarrollo bajo principios ecológicos y el respeto a las comunidades indígenas”, destaca el escrito.
“En 20 años no se ha podido desplazar ni romper con una élite corrupta y desprestigiada; sin canales de comunicación política con la mayoría de los pueblos indígenas”, señala.
En este sentido, exigen a las autoridades correspondientes cumplir a cabalidad lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV). Específicamente en lo referido a la consulta previa, libre e informada a los pueblos indígenas sobre cualquier acción que se quiera cometer en sus territorios ancestrales; que además pueda afectar su modo de vida.
Por último, en el comunicado reza que “si nosotros como pueblo indígena pemón controlamos los acontecimientos que nos afectan y afectan nuestras tierras y recursos, podremos mantener y reforzar nuestras instituciones, culturas y tradiciones, y promover nuestro desarrollo de acuerdo con nuestras aspiraciones y necesidades”.
