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Venezolanos buscan mejores precios en mercados a cielo abierto

Debido a la crisis económica que se vive desde hace años, los venezolanos se las ingenian para «estirar sus sueldos» y poder adquirir los productos alimenticios.

Por ello, una de las opciones más económicas para comprar verduras y frutas, son los tradicionales mercados a cielo abierto, los cuales en su mayoría son de comerciantes de los andes venezolanos.

En estos comercios informales que se observan en las calles de la región central del país. Se pueden encontrar las verduras y frutas a un precio más accesible. Además de tener los alimentos más frescos.

Los precios de las verduras y frutas en los mencionados lugares no superan de los 2.500.000 bolívares. Entre las verduras más costosas está el tomate, pimentón, limón y aguacate. Mientras que, los más económicos están la yuca, uyama y el topocho.

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Asimismo, los comerciantes afirman que reciben diversos tipos de pago desde bolívares hasta las transferencias por bancos internacionales; tales como Zelle y Banesco Panamá.

Es de mencionar que, en el último estudio realizado por el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas), los venezolanos requieren al menos de 294 dólares para adquirir los productos de la canasta alimentaria.

Al respecto, Fanny Rivero, quien se encontraba en un mercado a cielo abierto en la Trigaleña, indicó que los precios en ese lugar son más accesibles que los supermercados.

“Ahora los venezolanos nos acostumbramos a comprar de a poquito, ya que nuestro sueldos no nos alcanza para realizar los mercados como lo realizábamos hace 10 años. Por ello, estos mercados son una buena opción para los venezolanos”, destacó.

Comerciantes denuncian extorsión en las carreteras venezolanas

 Un comerciante que no quiso ser identificado denunció al equipo reporteril de Monitor Dólar Venezuela, la presunta extorsión que sufre semanalmente por funcionarios policiales cuando traslada los camiones a la ciudad de Valencia.

“Al menos tenemos que pasar por seis alcabalas cuando venimos a Valencia. En cada lugar los funcionarios policiales no piden dólares así como también alimentos”, destacó el comerciante.

En este sentido, señaló que los comerciantes procedentes de los andes venezolanos se las han tenido que ingeniar para ofrecerle buenos precios a sus clientes.

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