Anunciantes como Omnicom una de las casas publicitarias más grandes del mundo y que representa a marcas como McDonald’s, Apple o PepsiCo- recomendó a sus clientes suspender la compra de anuncios en Twitter.
La decisión responde, a una serie de eventos en los últimos días que pueden tener «serias implicaciones para los anunciantes».
Señaló los despidos en los equipos de seguridad de Twitter, la dimisión de varios altos ejecutivos y la proliferación de cuentas que usan el sistema de verificación de pago.
El sistema es puesto en marcha por Musk para hacerse pasar por empresas o personalidades.
Omnicon concluye que el riesgo para las marcas de sus clientes ha aumentado en Twitter hasta «un nivel que la mayoría consideran inaceptable».
ONU prevé seguir en Twitter pese a los planes de Musk
Anteriormente, otros gigantes del sector ya habían recomendado a sus clientes dejar temporalmente de anunciarse en Twitter y varias grandes empresas habían paralizado su publicidad en la plataforma.
Las decisiones son tomadas también por la incertidumbre en torno a la deriva que podía tomar la red social por las promesas de Musk de dar prioridad a la libertad de expresión.
Aunque el hombre más rico del mundo ha tratado de tranquilizar a los anunciantes, los acontecimientos de los últimos días parecen seguir alejando de Twitter la publicidad.
Falsas cuentas verificadas
Esta semana, el problema más sonado ha sido el estallido del número de cuentas impostoras, que han aprovechado la posibilidad de obtener el estatus de verificadas con solo abonarse al servicio Twitter
En la mayoría de casos, se ha tratado de simples bromistas que se han hecho pasar por empresas o personalidades, pero el riesgo para las marcas es obvio.
El viernes, la farmacéutica Eli Lilly cayó en la bolsa después de que un falso perfil suyo en Twitter anunciase que la insulina, uno de sus principales productos, pasaba a ser gratis.
El mensaje tuvo fuerte repercusión y obligó a la empresa a salir a desmentirlo.
Aunque la bajada estuvo enmarcada en un mal día generalizado para el sector sanitario, el caso de Eli Lilly ilustró los peligros que plantea el nuevo sistema de verificación de pago.
El Twitter Blue se puede obtener por sólo 8 dólares y sin ningún tipo de control, el cual durante años distinguió a cuentas relevantes y cuya identidad había sido confirmada.
Con información de EFE.
Foto referencial.