Las denominadas «Fake News» o «noticias falsas» se propagan cada día, también la infodemia y la desconfianza en las fuentes oficiales, lo que origina una confusión en los venezolanos, consumidores de información.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) hizo una clara advertencia de este hecho en Venezuela en un reciente informe.
La PNUD explicó que «tres de cada cuatro noticias que circulan en las redes sociales no son confiables, un récord mundial sólo igualado por Perú». Por lo que este país tiene una especial incidencia en el que acudir a otro medio de comunicación implica una pequeña odisea.
Por otro lado, el venezolano Steven García, dice que «hay mucha gente que cree que nunca ha existido el Covid-19. Siempre hacen la típica pregunta de qué ‘acaso tú conoces a alguien que le haya dado’. Como sembrando esa idea, pero como se han regado tantas noticias falsas, no se sabe realmente cuáles son las oficiales», explicó a la agencia EFE.
¿Conoces el Fake News? No caigas en sus redes
Por consiguiente advirtió García que junto a las «Fake News» también hay un término que se instaura y es: la infodemia. Según la OMS, este término se refiere a una cantidad excesiva de información, en algunos casos correcta, en otros casos no.
De esta manera, la infodemia, como panorama actual, aparece en escena la desinformación y los rumores, junto con la manipulación de la información con intenciones dudosas. En la era de la información, este fenómeno se amplifica mediante las redes sociales, propagándose más lejos y más rápido, como un virus. Según un boletín informativo emanado de la OPS y la OMS de reciente data.
Desconfianza en fuentes oficiales
En Venezuela se siembran muchos datos amañados desde las fuentes del régimen de Nicolás Maduro, siendo esta práctica muy común. La data de fuentes oficiales en muchas ocasiones no se compaginan con datos reales que en muchos casos las ONG´s tienen registrados.
Es entonces, donde el ejercicio del periodismo de investigación también contabiliza datos de hechos acontecidos en el país, por cuanto no hay credibilidad ni confiabilidad en informaciones gubernamentales. Es decir, Venezuela quedó atrás que los datos «oficiales» , así tengan la última palabra para corroborar estadísticas, porque distan de la veracidad.