El presidente de Rusia, Vladímir Putin, puso en alerta sus fuerzas nucleares ante la creciente oposición internacional a su invasión militar de Ucrania.
Entre tanto, Kiev comunicó que acepta negociar con Rusia «sin claudicar».
Por su parte, la Alianza Atlántica calificó esas palabras de «retórica peligrosa» mientras la Casa Blanca acusaba a Rusia de «fabricar amenazas» para «justificar mayores agresiones»; un «patrón de conducta» que considera habitual en el mandatario ruso.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, coincidió: «Si combinas esta retórica con lo que los rusos están haciendo sobre el terreno en Ucrania, lanzando una guerra contra una nación soberana independiente; esto añade gravedad a la situación»,
Las fuerzas de disuasión de Rusia la componen las fuerzas nucleares; incluidos los misiles intercontinentales, así como fuerzas no nucleares, y la defensa antimisiles, el sistema de alerta temprana y la defensa antiaérea.
Rusia ordenó una «ofensiva total» contra Ucrania
Sin embargo, este domingo ambos países anunciaron que negociarán en Bielorrusia, un firme aliado de Moscú. Ucrania ha informado que lo hará sin condiciones en la frontera ucranio-bielorrusa, junto al río Pripiat; y que el régimen bielorruso responde por la seguridad de la delegación ucraniana. Con información de 0800 Noticias.
Foto referencial.