La Organización Internacional del Trabajo (OIT), es un organismo especializado de las Naciones Unidas que se ocupa de los asuntos relativos al trabajo y las relaciones laborales. En esta oportunidad, desarrolló a profundo las consecuencias que trajo la pandemia; y encuentran que hemos llegado al punto en el que «No se sabe cuando termina el trabajo y comienza la vida privada».
Así mismo, se estima que es algo que no terminará con el fin de la pandemia; pues lo más seguro es que las empresas sigan implementando el trabajo desde el hogar como una opción para sus empleados. Por esta razón, deben velar por: «una mayor protección y mejor conocimiento de derechos y riesgos asociados a esta nueva forma de vida». Así lo señala la organización en un informe.
Específicamente, la agencia de la ONU señaló: «Con la pandemia, legiones de trabajadores se reconvirtieron de la noche a la mañana para poder trabajar desde sus hogares, para proteger sus empleos y sus vidas».
La Reina Isabel II Junto A Su Esposo, Finalmente Se Vacunó Contra El Covid -19
Según las cifras estudiadas por la organización, el Covid-19 aumentó la tasa de personas que trabajan en el hogar de un 7,9% a un 20%. Ante esto, lo que temen para los teletrabajadores es que no sepan diferenciar el tiempo de trabajo con el que deben de dedicar a ellos mismos y sus familias.
Su propuesta radica en introducir el derecho a desconectarse, que exija respeto al separar «la vida privada y la vida profesional».
Así mismo, una de las situaciones preocupantes en este ámbito es que casi todos los trabajadores se encuentran realizando sus labores de manera informal.
Por esto, la OIT insiste en que «Los gobiernos, en colaboración con las organizaciones de trabajadores y las patronales, deben actuar juntos. Todo esto, para garantizar que el conjunto de los trabajadores a domicilio puedan pasar de la casi invisibilidad al trabajo decente».
Haciendo un sondeo de la situación la única ventaja de trabajar desde el hogar viene siendo la flexibilidad de los horarios e incluso que cumplen jornadas más cortas. Sin embargo, incluso ganan un porcentaje menos que si estuvieran asistiendo a oficina.
