En el marco de la celebración de la 75 Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, Juan Guaidó solicitó a los países miembros del organismo, apoyar al gobierno interino en “su misión de proteger al pueblo venezolano”.
«Pido a todos los representantes de los Estados miembros que asuman la responsabilidad de asistir al gobierno legítimo de Venezuela en su misión de proteger al pueblo venezolano, de salvar a Venezuela y considerar una estrategia que contemple escenarios luego de agotadas todas las vías. Ha llegado el momento de acciones oportunas y decisivas. Todo el pueblo de Venezuela agradece a quienes no se han mantenido indiferentes ante esta tragedia”, dijo.
“Gobierno intransigente” Maduro ataca a EEUU durante su alocución en la ONU
Así mismo solicitó al Secretario General, Antonio Guterrez a movilizar la voluntad política de los Estados para la restauración de la soberanía en Venezuela.
“Honorable señor Guterres, como bien usted indicó en el año 2018, durante el debate de la Asamblea General sobre la Responsabilidad de Proteger de los Estados: ‘los principios fundamentales significan poco si no se aplican cuando más se necesitan’. Hoy en Venezuela, es cuando más se necesitan”, resaltó.
Guaidó no se quedó de brazos cruzados
Guaidó, reconocido por más de 50 países como presidente interino de Venezuela recordó que durante los últimos años los aliados internacionales implementaron medidas de «diplomacia preventiva». Sin embargo destacó que se ha “llegado casi al final de la escalada que trazan los pilares de la responsabilidad para proteger sobre mecanismos pacíficos y diplomáticos».
Dijo que se promovieron iniciativas en el marco de la Constitución para la solución de la crisis en Venezuela. Sin embargo el régimen se encargó de bloquear cada una de ellas. Guaidó recordó los procesos de dialogo con mediadores internacionales creíbles; convocatorias amnistías y reconciliación; por lo que no se les puede señalar de haberse quedado de “brazos cruzados en ningún momento”.
Además aludió que Nicolás Maduro convocó a unas elecciones parlamentarias fraudulentas. Esto con el fin de eliminar a «la Asamblea Nacional, el único pilar legítimo que se mantiene de pie en Venezuela».
