«Todos deberían poder ejercer el derecho al voto en paz, sin intimidaciones ni violencia»; dijo la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet; junto a la Unión Europea y la Iglesia Católica quienes hicieron un llamado a los bolivianos para evitar que se repitan los hechos de violencia que enlutaron al país tras los anulados comicios de 2019.
«Nadie quiere que se repitan los acontecimientos del año pasado»; afirmó Bachelet, quien expresó además su «profunda preocupación por el lenguaje incendiario y las amenazas proferidas por algunos actores políticos en las últimas semanas; así como por el creciente número de agresiones físicas registradas» en la campaña.
Bolivia celebrará complejas elecciones este domingo 18 de octubre
El izquierdista Luis Arce, segundo de Evo Morales, y el expresidente centrista Carlos Mesa son los candidatos con mayores posibilidades de ganar las elecciones; luego de una campaña marcada por la polarización entre seguidores y detractores del exmandatario Aymara, quien se encuentra refugiado en Argentina.
La ONU firmó un llamado conjunto con los obispos católicos bolivianos y la Unión Europea, quienes enviaron una misión de observación electoral al país; mientras piden a los líderes políticos locales «evitar la violencia durante y después del proceso electoral».
En el país también se encuentran misiones de observación de la Organización de Estados Americanos; del Centro Carter y de la Unión Interamericana de Organismos Electorales.
Siete millones de bolivianos elegirán presidente
Siete millones de bolivianos están convocados a votar en una jornada marcada por la inseguridad entre la población.
Los nervios de la población han generado una escasez artificial de gasolina en las ciudades; con largas colas de vehículos en las estaciones de servicio, según observaron periodistas de la AFP.
Además, existe una alta demanda inusual de bombonas de gas para uso doméstico y una afluencia masiva de personas en los supermercados.
También hay temor entre algunos bolivianos por los avisos que lanzaron líderes del MAS partido de Evo Morales hace algunas semanas señalando que defenderán la democracia en las calles en caso que su candidato perdiera por un supuesto «fraude» electoral.